¡Hola parejitas jugonas!
Una multitud de extraterrestres super peligrosos han invadido la tierra. Por desgracia para ellos, tienen el tamaño de un precioso hámster. Hoy jugamos a Tweegles.
Nº de jugadores: De 2 a 5.
Tiempo de juego: 15 minutos.
Autor: Jeremie Caplanne y Pascal Jumel
Empaquetado: Una de las típicas cajas de lata de Asmodee. Pequeña, fácil de transportar y todo cabe a la perfección en su interior.
En Tweegles nos meteremos en la piel de un cazador de estas simpatiquísimos extraterrestres que han aterrizado en un hogar muggle de lo más común, donde hay tijeras, mosquitos, jabón para limpiar a los monstruitos, matasellos,… si, matasellos… ¿vosotros no tenéis un matasellos junto al cepillo de dientes?
La idea del juego es muy muy sencillita. Dispondremos las 25 cartas de acción bocarriba en el centro de la mesa formando una matriz de 5×5. Las 25 cartas de Tweegles se reparten entre los jugadores o, método biblioteca, un adulto saca las cartas y supervisa que los pequeñajos no se destrocen las manos mutuamente.
Cada turno uno de los jugadores saca una carta Tweegles. Esta carta muestra que carta de acción debemos buscar para atrapar un extraterrestrecito, el primer jugador en atrapar al Tweegle con el símbolo correcto, se lleva el Tweegle. Al final de la partida, el jugador con más Tweegles será el ganador.
Las acciones que podremos realizar serán:
- Mosquito.
- Enchufe.
- Tijeras.
- Matasellos.
- Producto de limpieza
Como ya hemos dicho, el juego acaba cuando se terminan las cartas de Tweegles, en ese momento contamos los monstruitos en nuestro poder y, el que tenga más, será el ganador supremo.
El juego funciona muy bien a 2, ya que se convierte en un reto en pareja para ver quien tiene mayor rapidez visual. Con muchas manos, el juego adquiere un carácter más caótico, pero con sólo dos, se convierte en algo sencillo de jugar, fácil y con ganas de revanchas.
Mención especial se merece la ilustración del juego, es super-mega-hiper-ultra-monisima. Ese mini Chutlu rosita recién lavadito es extremadamente adorable.
Opinión de Fayzah: Fui humillantemente derrotada en la biblioteca por los niños, no me dio tiempo a pillar ni una mísera carta. Aun así, el juego me encanto. Es muy rápido y te ríes un montonazo. Que cada acción tenga su símbolo propio es un punto genial.
Opinión de Farko: El Jungle Speed empieza a quedársenos un poco viejo, y estas nuevas reiteraciones con más acción por turno y más confrontaciones en menor espacio de tiempo son siempre bienvenidas. Un toque divertido y con muchas risas (y dolores de mano por aplastamiento). Sin duda, un descubrimiento que ha pasado desapercibido para nosotros, hasta ahora.
Como siempre, os dejamos la página del juego en la BGG: Tweegles
Una reseñita en Cubo Magazine: Tweegles
Na svidenje!
Fua, pinta divertido, aunque mejor jugar con las uñas recortaditas!
Nosotros tenemos el Diavolo y ya nos pegamos muchas tortas con el.
Buena reseña!!!
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Es divertido. De un estilo a eso, a las latitas de asmodee. Si te gustan, este te molará. Y sí, las uñas y relojes siempre fuera!
Voy a contar una anécdota que se me olvidó en la biblioteca. Una niña peque (8 años) con otra de la misma edad. La primera (llamémosla A) le estaba encantando el juego. Muy emocionada y nerviosa con cada carta. Empezaba a tomárselo como algo personal. La otra (B) más tranquila y disfrutando relajada.
Con cada carta, A atacaba en menos de milésimas de segundo a las cartas. Si B conseguía llegar (era las menos veces, pero de vez en cuando lo hacía) la otra decía: Jopelines!; porque normalmente fallaba por poner mal la mano y la otra jugadora lo hacía bien antes.
En una de estas, ambas jugadoras al mismo tiempo ponen la mano sobre una carta. Ambas la colocan mal, porque ponen la mano del mosquito cuando debían hacer el gesto del matasellos. Una mano sobre la otra, les digo que lo están haciendo mal, que cambien la mano. B cambia la mano a un puño rápidamente… y A, unos segundos después, coloca su mano en forma de puño y lanza un divino golpetazo (al estilo Bud Spencer) contra la mano de la otra jugadora.
Menudo golpe, la otra niña diciendo que le duele la mano, y A diciendo si se puede llevar la carta…
Obviamente hubo una reprimenda, la carta para B y siguieron jugando (porque los niños son de goma y no les duele… o algo). Pero para que veáis, que la competitividad viene desde muy pequeños.
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Jojojo, cuando has escrito Bud Spencer he pensado que A le daba una guantá a mano abierta en la cara a B -Esta carta es mía-
XDDDDD
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Parece divertido para los niños, aunque algunos tendrían que jugar con guantes de boxeo para no hacer ni hacerse daño! 😛
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Más para lo primero. Que algunos son extremadamente competitivos y no entienden que es un juego.
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Buf; me suelen gustar los juegos de este tipo (Dobble, Swish, Fantasma Blitz y demás), pero Tweegles me dejó completamente frío. Demasiado tiempo explicando cada distinta acción para el tipo de juego que es. Si ya tienes todos los demás, quizá pueda merecer la pena echar una partida para recordar lo bueno que tiene el resto de esos juegos en comparación.
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Nosotros esperábamos menos, pero nos dio tan buen resultado y gustó tanto (incluidos nosotros) que nos cambió la idea. Quizá lo que dependa es las expectativas con las que llegas 😛
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