Proto-juego de hoy: Burgueses

¡Hola parejitas jugonas!

Comenzamos este concurso con un creador que entra por tercera vez en los finalistas del concurso. Un juego minimalista de la clase media pudiente. Hoy jugamos a Burgueses.

Nº Jugadores: 2

Creador: Santiago Eximeno

Ilustrador: Manuel del Olmo

Tiempo de Juego: 10 minutos (por ronda).

Nos encontramos con un juego minimalista que se puede jugar con una parte de una baraja de toda la vida. Eso sí, si os descargáis la versión de Manuel del Olmo ganáis en evitar utilizar fichas extra (las monedas son cartas también) además de unas ilustraciones preciosas (así como simbología orientativa que ayuda a jugar más rápidamente).

Entre los componentes encontramos: cartas de evento (de nobles), cartas de materiales (vino, trigo, seda, oro) y monedas.

Monedas

Es un juego de temática abstracta, así que no te vas a sentir en absoluto como un burgués.  El objetivo es acabar con la mayor cantidad de monedas. Se juega en dos “fases” (básicamente, jugamos dos partidas y sumamos las monedas de ambas). La otra forma de ganar automáticamente es conseguir vender 4 cartas del mismo valor.

Mercancías a vender

Para comenzar el juego, barajamos las cartas de materiales y entregamos dos a cada jugador. Luego colocamos el resto bocabajo al alcance de ambos jugadores. Barajamos las cartas de nobles y las colocamos bocabajo al alcance de ambos jugadores. Entregamos una moneda a cada jugador (que se coloca visible) y dejamos el resto en la banca.

Durante tu turno tienes tres opciones. Sólo puedes realizar una de ellas.

– Robar una carta de la baraja y colocar una carta en tu escaparate (frente a ti). Luego dale la vuelta a una carta de noble y sigue sus instrucciones (comenzando a afectar por el jugador que le dio la vuelta).

–Vender mercancías. Al vender, le quitas dinero al otro jugador. Si vendes una pareja de cartas del mismo número = 1 moneda, si vendes un trío de cartas del mismo número = 3 monedas. Si vendes cuatro cartas del mismo valor, ganas automáticamente la partida y no se juega una segunda fase. Es difícil hacer esto, pero no imposible. Luego le das la vuelta a una carta de noble. Esta acción sólo puede jugarse 1 vez por ronda (una ronda consiste en dos turnos, uno por jugador). Esto está ahí para evitar ver dar vueltas a la misma mercancía.

– Cambiar mercancías con el otro jugador. Paga 1 moneda a la banca y cambia una mercancía por otra del escaparate del otro jugador. No robas carta de mercancía. Roba una carta de noble al final.

Cuando acaba el turno SIEMPRE se roba carta de noble. Estas cartas dan y quitan dinero a voluntad de los jugadores, dependiendo de lo que se tenga en el escaparate.

El rey quita dinero al que más oro tenga. La reina da dinero al que tenga más seda. La vieja da dinero al que más trigo tenga. El obispo te da dinero si tienes vino, pero te quita una mercancía si no lo tienes (borrachín). El caballero te da dinero si el valor conjunto de tus materiales es par, pero te quita una moneda si es impar. Siempre se da o se quita 1 moneda. Se coge y se deja en la banca.

Cartas de nobles

Los nobles se barajan de nuevo cuando se acaban y se siguen sacando. Es interesante ir contando los nobles que han salido para tener una idea de lo que hacer en tu turno de manera que te beneficien la mayoría de los nobles, o al menos desfavorezca a ambos.

Cuando se acaba la partida, se juega una nueva partida comenzando por el otro jugador. Se suman las monedas que se han conseguido en ambas “fases” o partidas. El que más monedas haya conseguido es el ganador.

Es un juego tremendamente rápido. Tienes tres opciones entre las que elegir, y no suele ser difícil ver qué te viene bien. Merece la pena señalar que es un juego donde hay muy pocos turnos, por lo que cada turno cuenta muchísimo. Es importante ver lo que hay en mesa, ver los nobles que han salido, el dinero, calcular el tiempo que te tardará en bajar cartas, siempre atento a lo demás. ES DECIR, pocas cosas que hacer cada turno, pero importante lo que hagas cada turno y muy, muy rápido.

Nosotros echamos tres partidas seguidas en 40 minutos. En las tres partidas, una de ellas la gané vendiendo cuatro cartas, y las otras dos, con Fayzah más consciente de esa posibilidad, me ganó por más de 5 monedas cada partida. Hay que saber cuándo merece la pena vender y mermar la capacidad monetaria del otro jugador, cuando vender y dejar en la bancarrota a los demás, o cuando aprovechar para conseguir bajar todo lo posible.

PERO COMO NO NOS HA LLEGADO NINGUNA HAMBURGUESA CON EL JUEGO: quizá el primer turno es un poco aleatorio. Debido a lo que tienes que hacer (y es tienes, porque no hay otra opción) es bajar una carta, puede que esa carta te beneficie o no. Lo bueno, es que al jugarse dos partidas seguidas, esto se compensa muy bien. De todas formas, es un problema muy menor para todo lo que ofrece este mini-juego.

Opinión de Fayzah: Un juego muy portátil, con una baraja de cartas tienes todo lo necesario para poder disfrutarlo. Facilito de aprender a jugar, pero que requiere varias partidas para aprender a evitar que te coloquen las 4 cartas del mismo valor. Ideal para llevartelo de viaje.

Opinión de Farko: Pequeño, muy compacto, con un diseño precioso y fácil de enseñar y jugar. Sin duda está genial por menos de 3 euros que te cuesta recortar y montar la baraja. Un juego que cabe en un bolsillo y que te puede alegrar los viajes

Podéis descargar el juego desde la página del autor:

Burgueses de Santiago Eximeno y Manuel del Olmo

¡Hasta la próxima entrada!