¡Hola parejitas jugonas!
Escuchad esto:
¿Sientes ganas de matar a malvados seres venidos del inframundo?
¿Quieres que tu espada se clave en las bestias en tu camino?
¿Deseas que tu magia sirva de filo para abrir el paso a tus compañeros?
¿Has visto en tu mente tíos y muchachas con armadura y cotas de malla?
Si has respondido SÍ a alguna de estas preguntas, sigue leyendo la reseña, que este te va a gustar. Hoy jugamos a Mistfall.
Nº Jugadores: 1-4
Creador: Błażej Kubacki
Tiempo de juego: 1 hora, hora y media… depende de la misión y el tiempo que os toméis.
Editorial: Radikal Games
Empaquetado: Caja cuadrada, muchas, muchas cartas que meter, cartones, fichas, tableros… Pero cabe todo y cabe bien.
En Mistfall llevamos a un héroe de leyenda, el mejor de su clase, uno de esos héroes de los que los bardos cantan leyendas por los siglos de los siglos. Y estos héroes se embarcarán en cuatro misiones para derrocar a lo peor de lo peor, monstruos venidos de las peores de las pesadillas, corruptos por la magia, llenos de ira contra el mundo.
Cómo haremos esto es más realista. Cada personaje cuenta con una baraja personalizada, con artimañas, hazañas y ataques (así como armas y armaduras) propias e individuales. Las barajas servirán como nuestra vida y nuestras acciones. Si en algún momento se acaban las cartas de la mano y la baraja, estamos caput. Es un juego cooperativo, así que o ganamos todos, o perdemos todos.
Vale, vamos a ponernos a jugar. Aquí hay que echar un ratito, pero una vez sabes cómo va (y si lo has ordenado bien todo al meterlo en la caja en bolsitas) se tarda un poco menos. Cogemos un personaje (su baraja y tablero), colocamos el tablero central, una de las cuatro aventuras, seguimos sus instrucciones (cuántos monstruos, recompensas, localizaciones…) y ya estaremos listos para empezar.
Los turnos son:
Metemos bichos nuevos, según nos diga el marcador de bichos nuevos.
Podemos movernos a una nueva localización si en la que estábamos está ya segura, o huimos, pero para eso tendremos que pagar un coste.
Luego nos vienen los monstruos a nuestra área de héroe (delante de nuestro héroe), con un sistema de puntos de amenaza.
Nos toca ahora batirnos en duelo con los monstruos. Con cinco cartas en mano, algunas cartas de equipo frente a ti, el aliento de las bestias se siente en tu nuca, te toca ingeniártelas y combar como mejor puedas esas cartas, para hacer el mayor daño posible. Destruye todo lo que puedas, ayuda a tu compañero, acumula poder, guarda fuerzas… Aquí está lo más divertido del juego, el pensar las técnicas y aprender a usar a tu personaje.
Ahora les toca pegar a ellos, a tragar heridas y a protegerte de lo que puedas o quieras con armas y técnicas de protección.
Compruebas si ha terminado el evento. Si es así, limpia la zona de gotitas de sangre y tocará avanzar en el siguiente turno.
Al final del turno, coge una carta de tiempo y sométete a sus tormentos. Pocas son buenas con el jugador, y casi todas hacen avanzar el temporizador hacia el fin de la partida.
Bueno, pues así hasta que acabes el último evento de la misión, o alguno de vosotros muera en el camino, o todos muráis al final, o se acabe el tiempo. Tenéis las de perder, la verdad, porque el juego no es blandito contigo, sino que os va a pedir lo mejor de vosotros mismos.
Y esto no te lo va a demostrar solo mientras juegas, sino que aprender el juego va a ser un poco complicado al principio. Hemos leído muchos manuales, y este estará bastante tiempo entre los más complicados que hemos tenido en las manos. No porque no esté bien escritos, sino porque usan tantas palabras propias del juego, está estructurado de una manera tan rara, especifica tantos las variantes de cada acción y cada paso… que cuando acabas no sabes ni qué tienes que hacer en tu turno. Por suerte, encontramos pronto un tutorial que, aunque de una hora de duración, la verdad es que una vez visto, apenas tienes que leer casi nada del manual. Os recomendamos encarecidamente echarle un ojo (lo ponemos al final en los enlaces) cuando vayáis a poneros a jugar.
Ahora, una vez sabes jugar, ¿merece la pena jugar al juego?
Pues sí, merece la pena.
El juego te permite controlar a personajes muy diferentes, ir evolucionarlos comprando nuevas cartas de acción (con el dinero conseguido por matar a bichos puedes comprar técnicas nuevas y mejores), puedes acostumbrarte a usarlo, aprender cómo funciona, como trabaja y demás. Eso mola mucho, y a aquellos jugadores que les encanta encontrar los combos en una baraja, de cómo hacer que el personaje trabaje al 100%, encontrar esas técnicas escondidas entre las, en principio, sencillas claves de las cartas.
Si no te gustas los juegos de combos con temática fantástica, entonces este no es tu juego.
El juego contiene cuatro aventuras, que son más bien escenarios. La rejugabilidad del juego viene de las combinaciones entre los aventureros, los monstruos que van saliendo en la batalla, los retos, las localizaciones que van cambiando… vamos, hay bastantes cosas que cambian, menos el malo final de las cuatro aventuras.
¿Funciona bien a dos jugadores? Estupendamente. ¿Y a más? Ni idea, pero parece que será un poquito más largo. ¿Y con un jugador solamente? Pues si te gusta jugar solo, este juego te va a venir como anillo al dedo, y tienes muchos personajes que aprender a usar y disfrutar los cuatro escenarios.
Opinión de Fayzah: el reglamento da un poquillo de susto con tanto término. Abruma al principio, pero una vez que has conseguido tener todo clarito desaparece toda complejidad en cuanto a la hora de entender las reglas. El juego está muy bien si te gustan los juegos de cooperar para darle a un monstruo hasta en el carnet de identidad.
Opinión de Farko: cuesta ponerse a la tarea, el manual es durillo de leer, pero con la ayuda de internet, que no es poca, ha sido una experiencia muy divertida, que será plato de muy buen gusto para aquellos que disfruten con las barajas que puedes personalizar y los personajes para dominar.
Enlaces de interés:
Tutorial de Mistfall en Yo soy tu padre friki
Reseña de Mistfall en Darkstone
¡Hasta la próxima entrada!
Una reseña genial, habéis contado justo lo que necesitaba escuchar. Estuve a punto de comprarlo pero me asusto un reglamento tan duro. Mi experiencia me dice que este tipo de juegos acaban cogiendo polvo en mi estantería pero habéis hecho que me pique el gusanillo.
Aunque la experiencia pueda ser muy buena, ¿a lo mejor se puede comparar con otros juegos más sencillos como Super Fantasy? Y mi última pregunta es ¿Qué opinión os merecen los componentes y el arte gráfico?
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Componentes perfectos, buen cartón, buenas cartas. Lo único es que algunas cartas solo se reconocen que son de un personaje por un simbolito específico. Se agradecería un cambio de color de fondo, pero no es una cosa demasiado grave.
No se parece demasiado a Super Fántasy, por no decir que lo único que los une es lo de cooperativo. En este juego, cómo uses las cartas y cómo aprendas a combar el personaje, y a usarlo con inteligencia y a cooperar con tus compañeros es lo que te puede salvar. A mi me recuerda a cuando te dan una baraja de Magic e intentas buscar los combos, y luego le vas metiendo algunas cartas para añadir nuevas opciones que te parecen que encajan con tu estilo de juego.
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